Conquisté el lado de la cama que aún permanecía frío. Tú dormías. Dibujé con la yema de los dedos una circumferencia sobre la vértebra que más sobresalía en tu espalda. Rocé con la punta de mis pies tu tobillo y suavemente, me incliné para hablarte al oído. El contacto de mis labios en tu oreja te hizo despertar lentamente. Me recibió el océano de tus ojos. Mis huesos se deshicieron allí mismo y pasé a formar parte de tu pecho. Y así, emitiendo un sollozo casi inaudible,te confesé...
Es precioso...yo eso lo he vivído...fue solo hace un instante porque está en mi mente, lo vivo cuantas veces quiero...que afortunada soy, me digo en silencio para que nadie me escuche.
Pequeños momentos tesoro que nunca se sabe cuánto de eternos pueden llegar a ser. Y bonitos dibujos abajo. Y expresivos y penetrantes ojos en las bonitas fotos de más abajo... y gracias por la sugerencia musical, no lo conocía... me gusta. :) Un abrazo
Me imaginé una escena muy dulce y repleta de ternura. Qué lindo lo que escribiste:)
ResponderEliminarya estoy de vuelta!
ResponderEliminarEs precioso...yo eso lo he vivído...fue solo hace un instante porque está en mi mente, lo vivo cuantas veces quiero...que afortunada soy, me digo en silencio para que nadie me escuche.
ResponderEliminarLa foto es mágica.
Un beso.
Pequeños momentos tesoro que nunca se sabe cuánto de eternos pueden llegar a ser. Y bonitos dibujos abajo. Y expresivos y penetrantes ojos en las bonitas fotos de más abajo... y gracias por la sugerencia musical, no lo conocía... me gusta.
ResponderEliminar:)
Un abrazo
...pasé a formar parte de tu pecho! Impresionante!
ResponderEliminarme encanta la poesía y aquí, entre tus paredes cibernéticas, me detengo a descansar.
Un abrazo, un placer leerte!